Reforma 12
·
Potencial turístico del sur de Sonora
·
Primer congreso regional turístico y
económico
Por Raúl Campoy Robles
Navojoa,
Sonora. 28 de Junio de 2017.- Si bien es cierto que el turismo no representa
la principal actividad económica sonorense,
ni Sonora recibe la afluencia de
turistas como las que registran otras entidades mexicanas, al menos están sentadas la bases que sustenten un
programa estratégico a largo plazo que desarrolle de manera sostenible esta
actividad.
Es
de reconocer que Sonora, nació siendo un
estado agropecuario y no cuenta con
grandes antecedentes de servicios turísticos y de recreación; sino hasta ya
avanzado el siglo XIX con la consolidación del ferrocarril y la
apertura de los puertos de Guaymas, Yavaros
y Peñasco que permitieron el
intercambio de mercancías y la afluencia de personas, por citar
algunos aspectos que explican los
precedentes del turismo en la entidad.
Sin
embargo, la cercanía del estado en
referencia con los Estados Unidos,
y la apertura comercial, permitió
a Sonora marcar sus bases para
diversificar sus actividades
dinámicas a través de diversas
estrategias como son: la explotación de diversos recursos, entre los que
sobresalen bosques naturales, minería, las playas de Bahía de Kino, San Carlos,
Puerto Peñasco y Golfo de Santa Clara, por citar algunos.
El folclore, a través de las danzas regionales
del venado, sus etnias, sus artesanías talladas
a base de palo fierro, su flora y
fauna en
la sierra como en los valles del
yaqui y mayo, solo
fueron conocidos a través de campañas publicitarias que si bien son importantes,
deben ser fortalecidas
por los tres niveles de gobierno que, invirtieron y deben continuar
haciéndolo en vías férreas y carreteras
pavimentadas sin soslayar la importancia que reviste para el turismo
servicios adicionales de aeropuertos, aeródromos y otros no menos importantes.
En
este sentido, y ante lo anteriormente
abordado, resulta importante la celebración del primer congreso regional turístico y
económico que presidieron
autoridades municipales de
Navojoa, diputados locales, presidentes
de cámaras empresariales y directivos de
la Oficina de Convenciones y Visitantes de este ciudad.
El
evento celebrado la semana
anterior, no fue más allá de abordar el
potencial turístico de la región y de destacar
que se pueden crear grandes
proyectos turísticos. En pocas palabras,
no se anunciaron proyectos viables que en el corto plazo exploten
los recursos turísticos de Navojoa, Etchojoa, Huatabampo, Álamos, Benito
Juárez, Cajeme y Quiriego, por mencionar
algunos municipios del sur de
Sonora. Por lo que puede deducirse que aún
estamos en pañales, por llamar de
alguna manera el tema abordado en este
espacio.
Ante una
necesidad de fórmulas que permitan atraer el turismo a Sonora, es conveniente citar como
ejemplo el actual periodo de vacacional de verano ya que representa para las familias
sonorenses una oportunidad para visitar la playa, la montaña, u otros lugares
de recreación, así como centros artísticos y culturales. Es de recordar que el sur de Sonora
cuenta con lugares realmente
envidiables para otras entidades
de México, incluso para muchos países. Entre otros no menos
importantes figuran San Carlos, Guaymas y sus playas, las presas
ubicadas en Cajeme, los centros
ceremoniales de la etnia yaqui y mayo así como
los museos destinados a preservar tan importantes culturas.
Más al sur, se localiza la vasta
región del mayo donde las playas de
Etchojoa (el Siaric) y Huatabampo, (las
Bocas, Huatabampito, el Riíto el
Bachoco, etc.) Son ampliamente
visitadas por turistas regionales y extranjeros, particularmente en verano y Semana Santa. Otro atractivo
turístico es la montaña, siendo los
municipios de Guaymas, Cajeme, Navojoa, Quiriego, Huatabampo y Álamos, aquellos
preferidos para la caza de diversas especies. Entre ellos sobresalen Álamos por
su amplia extensión territorial y sus límites con Chihuahua y Sinaloa. Fundado en 1862, Álamos es elegido por turistas la mayor parte del año, dada su diversidad
cultural y espacios para la recreación y
paseo familiar.
Visto
desde otra perspectiva, el presente periodo vacacional, representa para el
turismo una actividad económica y sociocultural
cuya importancia reside en el hecho de que el vacacionista pueda entrar en contacto con
otras culturas, otras sociedades, otras formas de vivir y otros ambientes
geográficos. Si bien, estos datos pueden conocerse a través de enciclopedias,
mapas, fotos y el internet, es solo a
través del turismo que el hombre puede interactuar directamente con esas realidades diferentes a las que uno acostumbra a
experimentar, pudiendo así enriquecer su propia cultura y experiencia personal.
Por su atención gracias.